«Esta pandemia ha destapado que todos podemos sufrir enfermedades mentales»
La Asociación de Enfermos Mentales Graves de Elche (ASFEME) lleva 25 años ayudando a un colectivo prejuzgado. Su directora, Noelia Aznar, asegura una mayor sensibilización de la población en salud mental tras el covid.
P. ¿Qué ha destapado esta pandemia en cuanto a problemas de salud mental?
R. Además de la innegable destrucción a todos los niveles laborales, sociales y económicos, la pandemia ha visibilizado la vulnerabilidad de la población en general, que han visto aquejada su salud mental con incremento en la incidencia de intento de suicidio, o con trastornos emocionales y mentales. La pandemia ha hecho visible la falta de recursos en salud mental y la vulnerabilidad de la población a padecer un trastorno mental. La salud mental importa, porque concierne a todos y a todas, porque todos somos susceptibles de pasar por
ello.
P. ¿Percibe que existe una mayor concienciación en cuanto a problemas mentales que antes de la pandemia?
R. Antes del covid, tener un trastorno mental era algo de unos pocos. «Personas enfermas» los llamaban, o como decían las personas de menor sensibilidad, «locas». Sin embargo, resulta innegable que el este virus ha tenido un impacto en la salud mental de la población general y sobre todo en aquellas personas que lo han vivido en primera línea o lo han visto en su círculo más cercano, sin estar preparadas. Hemos logrado una mayor sensibilización de la población, ya que muchos han entendido que cualquiera puede sufrir enfermedades mentales. Por eso debemos humanizar estos casos.
P. Estar bien de salud siempre ha estado relegado a un físico, pero ¿qué es estar sano verdaderamente?
R. La Organización Mundial de la Salud define un buen estado de salud como «un estado de completo bienestar físico, mental y social y no solamente la ausencia de enfermedades». Además, la OMS aboga por la integración de la atención de la salud física con la mental porque «no hay salud sin la salud mental». Debemos entender que es vital tener en cuenta esta afirmación para hablar de salud global. Esto viene dado porque las personas afectadas por un problema de salud mental, tienen más probabilidades de sufrir otras patologías como diabetes, cardiopatías y cáncer de colon y de mama, por ejemplo. A la hora de luchar contra una enfermedad, la cabeza juega también un papel fundamental, que en algunos casos es olvidado.
P. Al hilo de la importancia de una correcta salud mental, el suicidio ya es la primera causa de muerte no natural en España. ¿Qué está ocurriendo?
R. Esta pandemia también ha sacado a la luz el tema de la conducta suicida, como bien dices es la primera causa de muerte por causas no naturales en España, algo estremecedor y que no se está abordando correctamente. El suicidio sigue siendo una de las principales causas de muerte en todo el mundo, según las últimas estimaciones de la OMS. Cada año pierden la vida más personas por suicidio que por VIH, paludismo o cáncer de mama, o incluso por guerras y homicidios. En 2019, se suicidaron más de 700.000 personas, es decir 1 de
cada 100 muertes fueron personas que se quitaron la vida. Aquí la salud mental juega un papel determinante, siendo imprescindible dar herramientas a la sociedad para abordar situaciones difíciles y evitar que ocurran estas catástrofes.
P. ¿Cómo debemos ayudar a las personas con problemas mentales graves?
R. Para ayudar a personas que padecen una enfermedad mental debemos romper estereotipos en torno a las personas con enfermedad mental: peligrosidad, imprevisibilidad, antipatía… Que cada persona, en su fuero interno, abra su mente ante esa necesaria tolerancia y conocimiento. Todos somos diversos y no tenemos ningún derecho a señalar con el dedo. Debemos tener más
empatía y generosidad, esto siempre nos viene bien a todos. Esto es necesario porque no tendremos una sociedad civilizada si existen pensamientos excluyentes.
P ¿Son efectivos actualmente los tratamientos de prevención de enfermedades mentales?
R. Debemos poner el foco en una combinación adecuada de programas de tratamiento y prevención en el campo de la salud mental, en los marcos de estrategias públicas generales, puede evitar años vividos con discapacidad e, incluso, la muerte prematura, reducir el estigma que rodea a las enfermedades mentales, aumentar considerablemente el capital social, ayudar a reducir la pobreza y a promover el desarrollo del país.
Entrevista completa en: https://mynmedia.mynews.es/noticies/intelligence/?dre=INF202109270020&tipus=pdf&idCarpeta=13934